No one can find me here in my soul


jueves, 17 de marzo de 2011

Reminiscencias de la ciudad fantasma


Soy un suspiro del tiempo que se deshace entre mis dedos,
lágrimas que no se ven, igual que hay ríos bajo tierra.
Me derrito y me derramo por los ojos, ojos soñadores

La oscuridad y el silencio me rodean
es un silencio que me aprisiona, me encadena,
no me deja respirar.
Piel y metal.
Nada más
...

Invierno 2004?

5 comentarios:

  1. Y lo que ha llovido desde entonces.

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  2. Aquí está lloviendo. Hay dos palomas posadas en una antena de televisión, en un tejado. Aquí los hacen de pizarra, y son grises. Las palomas también. Y cuando llueve, pues así está el cielo. La gente se viste de negro. Hoy, en el metro, un hombre iba sentado y dormido en el vagón; daba un cierto olor a alcohol. Cuando pasábamos una curva, se caía de ese lado, se despertaba a mitad de caer y se enderezaba; enseguida se dormía. Evidentemente, nos perjudicaba; digo por las miradas que echaban los honorables con corbata que allá se dirigían a sus centros de trabajo.

    Un poco como cascar un huevo y que se te caiga al fregadero la yema y blanco. Algo así por dentro. O como así: http://www.youtube.com/watch?v=E881fLF-EJ0


    http://www.youtube.com/watch?v=8U7xpGi5SsU

    En fin... "pesadumbre daré a unos caracoles". Las palomas se han ido.

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