No one can find me here in my soul
martes, 11 de octubre de 2011
lunes, 3 de octubre de 2011
Paraisos efímeros
La nostalgia se velaba con el éter púrpura y naranja.
En otra densidad floté crucificada,
entre fulgores de líquida plata y crestas doradas.
Cristal agitado como la respiración de una muchacha presta a ser desvirgada.
Suelo arado por el lamer de las ondas que acarician las caderas y golpean los costados.
¿Quién me untan el alma con un bálsamo para soplar encima después?
La soledad no pesa tanto como el vacío de una ausencia.
En otra densidad floté crucificada,
entre fulgores de líquida plata y crestas doradas.
Cristal agitado como la respiración de una muchacha presta a ser desvirgada.
Suelo arado por el lamer de las ondas que acarician las caderas y golpean los costados.
¿Quién me untan el alma con un bálsamo para soplar encima después?
La soledad no pesa tanto como el vacío de una ausencia.
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